El Carácter De Los Gallos.
Escrito por: Ricardo Pedraglio Flórez.
Es sabido que los animales no piensan, pero son capaces de recordar y reconocer sonidos, olores, formas, etc. ¿Qué pasaría si los gallos pudiesen hablar?
Entre el grupo de las gallináceas o mejor dicho, dentro de la familia Facianidae, a la que pertenecen las gallinas, faisanes, pavos y otras, el Gallus gallus domesticus es la especia que más se ha domesticado, por lo que se ha adaptado a la forma de vida del hombre. Justamente por eso se le cataloga como Domesticus.
Querer hablar de la psicología del gallo es como sumergirse en un mundo sin fronteras. Ya se ha hablado y escrito tanto de este tema, que muchas universidades han creado carreras de psicología animal. En las aves es posible observar que cada ejemplar tiene su forma de ser, diferente de la de otros. No me refiero a la diferencia que existe en la forma del ave ni a las características típicas de las razas, si no al comportamiento de cada individuo.
Al caminar por los corrales o casilleros, se puede ver que cada ejemplar reacciona de manera diferente ante la presencia de seres humanos. Aun más reacciones o actitudes se observan ante la presencia de la persona encargada de atender a diario a las aves, ya que es quien está en mayor contacto con ellas. Solo por el hecho de ver aparecer a esta persona, los animales prácticamente se van contra la malla, pues suponen que les van a dar de comer o beber, que van a sacarlos para que se revuelquen en la arena y tomen el sol, que los van a bañar con agua fresca o que les van a colocar una gallina, para darle a su dueño una muy buena progenie. Como sea, las aves saben muy bien que habrá actividad y que de alguna manera ellas están comprometidas y forman parte de la acción.
Hay una gran gama de actitudes que se pueden ver en el comportamiento de las aves, unas son más agresivas y otras más amigables; existen las que, apenas ven a una persona, se echan a correr asustadas. Esto me hace pensar que no hay mucha diferencia entre ellas y nosotros. Por ejemplo, en el caso del hombre, una persona puede ir cambiando de carácter a lo largo de su vida, desarrollando una actitud de defensa; lo que en los animales correspondería a una adaptación de la especie ante un medio adverso; tropiezos, malas experiencias, estrés, etc. Una persona que en algún momento de su vida fue “cordial-sumiso”, si al paso del tiempo va teniendo malas experiencias, con los años desarrolla un arma de defensa y se va volviendo “dominante-hostil”.
Al igual que los humanos, los gallos también pueden experimentar una serie de etapas muy marcadas, o no muy marcadas durante el desarrollo. Por ejemplo, es posible determinar el carácter que un gallo va desarrollando, y dirigirlo hacia donde se desee.
Desde que nacen los pollos, se puede observar que siempre hay un líder en el grupo; por lo tanto, en el escalafón de esta sociedad también habrá una víctima en el grupo o la parvada. A medida que crecen, si se toma su tiempo, usted puede observar actitudes en el momento de darles su ración de alimento: se acercaran primero los pollos (las madres normalmente les dan preferencia; mediante una serie de sonidos típicos para llamar su atención, les indican donde se encuentran). Algunas malas madres compiten con los pollos, lo que ocurre más a menudo cuando ya quieren abandonarlos.
Entre los pollos siempre comerá primero el líder, al que sigue un orden establecido. Más allá están los rezagados del grupo, de tamaño disminuido y que además llevan consigo las huellas del abuso, pues están todos pelados y maltrechos, cojean, y son casi enanos comparados con el resto. También se puede observar que los pollos más oprimidos del grupo andan siempre con la cabeza gacha, debajo de una línea o nivel imaginario, y si se les ocurre erguirse, inmediatamente son sometidos a picotazos, no necesariamente por el líder dominante del grupo, sino por otro pollo que se encuentre por debajo del nivel de éste, pero por encima del mas sumiso. Si se hiciera un orden del escalafón de una camada modelo, resultaría algo así:
· Nivel superior: el líder del grupo, “hostil-dominante” con todos; altura de 30 cm; erguido, sus ojos están a 30 cm del suelo.
· Nivel medio superior: el segundo en el mando “hostil-sumiso” con el anterior y “hostil-dominante” con los inferiores; altura 28 cm, erguido, sus ojos están a 25 cm del suelo.
· Nivel medio: el tercero, el cuarto y el quinto. Entre “hostiles” y “cordiales-sumisos” con los anteriores respectivamente, y “hostiles-dominantes” con los inferiores. Altura del tercero 25 cm; del cuarto 23 cm, del quinto 22 cm. Se mantienen erguidos. La altura de sus ojos respecto del suelo: del tercero, 22 cm; del cuarto, entre 20 y 21 cm, y del quinto, entre 18 y 20 cm.
· Nivel inferior: el sexto y último pollo de la camada no tiene mando. Es “Sumiso-cordial” con todos los anteriores. Siempre relegado a una esquina; casi arrastra su pecho sobre el suelo; corre de un lado a otro. Altura de 15 cm. Nunca esta erguido; mantiene su cabeza a 10 cm o menos del suelo.
¿Selección natural? ¿El más fuerte vive? Pues parece que así es. Efectivamente, al presentarse cualquier problema infeccioso, los más débiles son los primeros en morir, si es que aún no ha pasado por allí la mirada inquisidora del dueño para eliminar a los que “no sirven”. Hay muchos criadores que se enorgullecen al tildarse (ellos mismos) como Héroes en ese sentido.
Los débiles y más corridos del grupo suelen tener esa actitud sumisa en el futuro, y si uno tiene suerte de levantarles el ego, es posible que de grandes puedan pelear. Pero, ¿qué ocurre si reciben fuertes golpes o, peor aún, si en la cancha reciben el arma de su oponente en el cuerpo? Quizá relacionen esos golpes con los traumáticos “abarates” de su infancia y se echen a correr.
En otra oportunidad podemos tener gallos muy agresivos, a los cuales no es posible ni ver, ya que se lanzan sobre la reja o malla para meterle una zurra a quien se acerque. Son gallos que nunca se dejan agarrar y a los que normalmente los entrenadores detestan preparar. Estos gallos “dominantes-hostiles” son muy peligrosos, no para sus dueños, sino por la actitud y la posición que toman en la cancha. Normalmente, una vez sueltos en la arena y con el contrincante enfrente, prefieren atacar al amarrador o a una persona que se encuentre cerca. Una vez que se encuentran ante el otro gallo, pueden pelear de manera alocada, y muchas veces pierden y otras se echan a correr. No son gallos recomendables.
A pesar de lo anterior, conozco a quienes les encanta que sus gallos tengan (según ellos) “carácter”, y por ello los están fastidiando y enojando con escobas y sacudiéndoles pañuelos para que salten o ataquen. Parece ser que para estas personas eso es “nervio y calidad”. Lo único que logran es enfadar a las aves, estresarlas y engañarse a sí mismos.
Los gallos ideales o, mejor dicho, aquellos que se deben seleccionar o educar, son los gallos de tipo “cordial-dominante”. Esta clase de gallo es el que se deja acariciar y manipular, sin agredir a las personas. Es el gallo al que se le conoce como inteligente. Es cauto, observador, puede tomar la iniciativa, sabe cuándo atacar, mantiene su distancia, etcétera.
Otro caso es el gallo “cordial-sumiso”, que puede ser peligroso, ya que el hecho de ser sumiso puede llevarlo a no saber tomar decisiones, no tener iniciativa o no asumir actitudes correctas en el momento necesario. Para finalizar, en la siguiente lista mostramos sinónimos que aclaran el significado de estas marcadas y diversas personalidades:
· Dominante: absoluto, autoritario, avasallador, prepotente, imperioso, sobresaliente, exigente, subyugador, severo, soberbio, intransigente.
· Hostil: adverso, enemigo, opuesto, pugnante, adversario, rival, incompatible, irreconciliable, rencoroso.
·Cordial: amable, afectuoso, afable, simpático, expresivo, espontaneo, cortes, franco, sencillo, confortante, tratable, sociable.
·Sumiso: obediente, dócil, sometido, bienmandado, manejable, subyugado, rendido, reverente, esclavo, resignado, manso.
En resumen: en los gallos hay hasta cuatro “personalidades” con marcadas diferencias:
· Dominante- cordial: Es el gallo ideal, inteligente, sabe cuándo y cómo actuar.
· Dominante- hostil: Es el gallo que de alguna manera podría manejarse cuidadosamente. Es alocado y normalmente va “al bulto”.
· Cordial- sumiso: Gallo no confiable; es mejor eliminarlo.
· Hostil- Sumiso: Gallo no confiable; recomiendo eliminarlo.
Para finalizar Queremos agradecer a toda la comunidad Gallistica el apoyo que nos esta brindando en todas nuestras Redes Sociales, Facebook, Twitter y Youtube. ya que gracias a todos ustedes este blogg se ha convertido en una herramienta muy útil para muchos Galleros del mundo. Seguiremos trabajando para brindarles información de utilidad y puedan seguir aprendiendo mas sobre estos Hermosos animales, Los Gallos De Pelea.
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